Arquitectura Organica

Gaudí
La arquitectura orgánica u organicismo arquitectónico es una filosofía de la arquitectura que promueve la armonía entre el hábitat humano y el mundo natural. Mediante el diseño busca comprender e integrarse al sitio, los edificios, los mobiliarios, y los alrededores para que se conviertan en parte de una composición unificada y correlacionada. Los arquitectos Gustav Stickley, Antoni Gaudí, Frank Lloyd Wright, Alvar Aalto, Louis Sullivan, Bruce Goff, Rudolf Steiner, Bruno Zevi, Hundertwasser, Samuel Flores Flores, Imre MakoveczAntón Alberts son los mayores exponentes de la denominada arquitectura orgánica.
 
Imre Makovecz

El estilo orgánico es un movimiento arquitectónico que se deriva del funcionalismo o racionalismo y que puede considerarse promovido fundamentalmente por los arquitectos escandinavos en la década 1930-40 y por el arquitecto americano Frank Lloyd Wright. El movimiento acepta muchas de las premisas del racionalismo, como son la planta libre, el predominio de lo útil sobre lo meramente ornamental, la incorporación a la arquitectura de los adelantos de la era industrial, pero procura evitar algunos de los errores en que cae el racionalismo y aportar nuevos valores a la arquitectura.

Erik Gunnar Asplund
Pueden considerarse a Erik Gunnar Asplund en Suecia y a Alvar Aalto en Finlandia como los principales propugnadores de esta corriente, cuyas ideas fundamentales podrían resumirse de la forma siguiente:

1) Una mayor preocupación por la vida del hombre. Se mira más al hombre, al que ha de servir la arquitectura, que a la propia arquitectura. La atención del arquitecto no debe limitarse a las estructuras y a la disposición de los ambientes, sino que debe extenderse a los problemas psicológicos y vitales del hombre.

2) Una nueva conciencia de los espacios internos: aunque la arquitectura racionalista propugna una adaptación de los volúmenes a las necesidades de planta, esos volúmenes están dominados por un estilo cubista, de formas tetraédricas, en- las que se encajan las necesidades, buscando además con ello una simplificación estructural y constructiva. Asplund, Aalto y sus escuelas comienzan por el estudio de los ambientes, de los recorridos, de los movimientos del hombre y llegan a la creación de los espacios que consideran más indicados, a los que se les proporciona una envolvente apropiada. Las soluciones técnicas y estructurales deben ceñirse a esos espacios, dando lugar normalmente a formas más complicadas, no repetidas, económicamente más costosas y difíciles de industrializar. En este aspecto, el organicismo abandona uno de los postulados del racionalismo, creando en cambio, cuando es bien interpretado, realizaciones más jugosas y humanas. Las obras de los grandes arquitectos orgánicos son mucho más personales y difíciles de imitar, y por lo tanto es más propio hablar de un planteamiento que de un estilo de arquitectura orgánica. Como obras maestras de la arquitectura orgánica podemos citar la biblioteca de Viipuri (1930) y el pabellón finlandés en la Exposición de Nueva York de 1939, ambos de Aalto; la ampliación del Ayuntamiento de Goteborg (1937) de E. Asplund, y la casa de Taliesin West, en Arizona, de F. Lloyd Wright.
Alvar Aalto
Definición

El término “arquitectura orgánica” fue acuñado por el famoso arquitecto Frank Lloyd Wright (1867-1959):

"Y aquí estoy ante ustedes predicando la arquitectura orgánica, declarando que la arquitectura orgánica es el ideal moderno y la enseñanza tan necesaria si queremos ver el conjunto de la vida, y servir ahora al conjunto de la vida, sin anteponer ninguna "tradición" a la gran TRADICIÓN. No exaltando ninguna forma fija sobre nosotros, sea pasada, presente o futura, sino exaltando las sencillas leyes del sentido común —o del super-sentido, si ustedes lo prefieren— que determina la forma por medio de la naturaleza de los materiales, de la naturaleza del propósito... ¿La forma sigue a la función? Sí, pero lo que importa más ahora es que la forma y la función son una."
F. L. Wright, Organic Architecture.

En 1940 Alvar Aalto expresó la necesidad de que la arquitectura se centre en aspectos psicológicos, y no sólo en requisitos funcionales o técnicos:

"La arquitectura es un fenómeno sintético que incluye prácticamente todos los campos de la actividad humana... En el último decenio, la arquitectura moderna ha sido funcional principalmente bajo el aspecto técnico, subrayando sobre todo el punto de vista económico de la actividad constructiva. Esto ha sido indudablemente útil para la producción de alojamientos para el hombre, pero ha constituido un proceso demasiado costoso, si se considera la necesidad de satisfacer otras exigencias humanas... El funcionalismo técnico no puede pretender ser toda la arquitectura... Si se pudiera desarrollar la arquitectura paso a paso, comenzando por el aspecto económico y técnico, y continuando después con las funciones humanas más complejas, entonces el planteamiento del funcionalismo técnico sería aceptable. Pero esto es imposible. La arquitectura no sólo cubre todos los campos de la actividad humana, sino que debe ser también desarrollada simultáneamente en todos esos campos. Si no, tendremos sólo resultados unilaterales y superficiales... En lugar de combatir la mentalidad racionalista, la nueva fase de la arquitectura moderna trata de proyectar los métodos racionales desde el plano técnico al campo humano... La presente fase de la arquitectura es, sin duda, nueva y tiene la precisa finalidad de resolver problemas en el campo psicológico..."
Alvar Aalto

Samuel Flores Flores

Evolución

El teórico David Pearson propuso una lista de reglas hacia el diseño de una arquitectura orgánica. Se conoce como la carta de Gaia para la arquitectura y el diseño orgánicos. Según Pearson el diseño debe:

Ser inspirado por la naturaleza y ser sostenible, sano, conservativo, y diverso.
Revelar, como un organismo, el interior de la semilla.
Existir en el “presente continuo” y “comenzar repetidas veces”.
Seguir los flujos y ser flexible y adaptable.
Satisfacer las necesidades sociales, físicas, y del espíritu.
“Crecer fuera del sitio” y ser único.
Celebrar la juventud, jugar y sorprenderla.
Expresar el ritmo de la música y de la energía de la danza.

Un ejemplo bien conocido de la arquitectura orgánica es Fallingwater o Casa de la Cascada de Frank Lloyd Wright, diseñado para la familia de Kaufman en la zona rural de Pensilvania. Wright tenía muchas opciones para localizar una casa en el amplio solar, pero eligió colocarla directamente sobre la cascada en el lugar que la familia solía hacer sus reuniones campestres.
Los pilares de piedra del lugar y vigas cantilever de gran luz componen un edificio único en medio de un exuberante bosque.

 Casa de la cascada, Frank Lloyd Wright


Animación de la casa de la cascada





El arco en la arquitectura




Marco Polo describe un puente, piedra por piedra.

- ¿Pero cuál es la piedra que sostiene el puente? - pregunta Kublai Khan.
- El puente no está sostenido por esta piedra o por aquélla, -responde Marco- sino por la línea del arco que ellas forman.
          Kublai permanece silencioso, reflexionando. Después añade:
- ¿Por qué me hablas entonces de las piedras? Lo único que me importa es el arco.
          Marco Polo responde:
- Sin piedras no hay arco.
Italo Calvino.- Las ciudades invisibles. (Siruela bolsillo. Madrid 1994. Pág. 96)


El arco:

El arco apareció en Mesopotamia, en la civilización del valle del Indo, Egipto, Asiria, Etruria y más adelante en la Roma Antigua. El arco se utilizó para las estructuras subterráneas y de drenaje, fueron los romanos los primeros en usarlos en la superficie, aunque se pensaba que los romanos aprendieron su uso de los etruscos. El arco ha sido usado en algunos puentes en China desde las dinastía Sui y en tumbas desde la dinastía Han. El denominado arco romano es de forma semicircular y construido a partir de un número impar de dovelas. Se necesitan un número impar de piezas para que haya una central o dovela clave.

El arco es la forma curva de cerrar un vano y no consta de una sola pieza sino de varias, que se denominan dovelas. Las dovelas tienen una forma trapezoidal con mayor anchura en la parte exterior que en la interior mientras que pueden ser planas en su parte frontal y trasera. Para que el arco sea estable cada una de las piezas debe estar bien calculada y los lados por los que se unen deben estar muy bien trabajados.

Existe una tendencia de empuje de los lados del arco hacia fuera, que debe ser contrarrestada por un mayor peso de albañilería para empujarlo hacia dentro. El arco semicircular puede ser aplanado para hacer un arco elíptico. Los romanos usaron este tipo de arco semicircular en muchas de sus estructuras tradicionales, como acueductos, palacios y anfiteatros.
En la Edad Media, el arco se convirtió en un importante técnica en la construcción de catedrales y todavía se usa hoy en día en algunas estructuras como en los puentes.



Construcción y partes.

Para construirlo se realiza una plantilla de la forma y dimensiones del arco con la que se realiza el despiece en dovelas. Esta plantilla también sirve de base para la fabricación de una estructura de madera (cimbra) que tiene la forma del arco por su parte interior (intradós) y sobre la que se van a colocar las dovelas mientras se va construyendo. Una vez hechas las dovelas y los elementos sobre los que se va a colocar el arco se instala la cimbra; para ello la parte superior de los elementos sustentantes tienen un saliente a cada lado que se denomina imposta. A continuación se van colocando las distintas dovelas sobre la cimbra a derecha e izquierda comenzando por los salmeres hasta que se llega a la parte superior donde se instala la clave sobre las contraclaves y el arco queda cerrado. Finalmente se retira la cimbra, deslizándola de las impostas o deshaciéndola en sus piezas.

arco-con.gif (24551 bytes)

Partes:
1.- Imposta
2.- Salmer
3.- Dovela
4.- Contraclave
5.- Clave
6.- Intradós
7.- Extradós (trasdós)
8.- Rosca
9.- Luz
10.- Flecha
11.- Riñón
12.- Jamba



arco-par.gif (15926 bytes)

 Descarga del peso y estabilidad del arco.

El peso de los materiales tiende a caer en vertical hacia el suelo pero las dovelas tienen una característica forma trapezoidal de manera que su parte exterior, más ancha, no cabe por la parte interior que es más estrecha. Así, el peso de la clave, que tiende a caer en vertical hasta el suelo, al no poder hacerlo por la forma de trapecio, se "encaja" horizontalmente en las dos piezas laterales (las contraclaves). El peso se desplaza, pues, de forma diagonal como resultante de la vertical y la horizontal. De esta forma el arco, si las dovelas están bien construidas, no tiene ningún problema de estabilidad; el punto débil del arco está en las impostas ya que, si los elementos sustentantes no fueran suficientemente firmes, se abrirían hacia el exterior aumentando el espacio entre las dovelas y permitiendo que la parte superior, más ancha, cupiera por la parte inferior, más estrecha.

arco-pes.gif (6830 bytes)


Variaciones de la altura de los soportes y la anchura (luz).

Si elevamos los elementos sustentantes del arco habrá más peligro de que éste se abra y se venga abajo por lo que la forma de dar estabilidad al arco (aparte de que esté bien construido) consiste en reforzar suficientemente los elementos donde se va a apoyar de manera que no se abran hacia el exterior.

Sin embargo, en un arco bien construido, la mayor luz (anchura interior del mismo) se traduce únicamente en un mayor numero de dovelas pero puede ser tan estable como un arco de inferior anchura.

Las limitaciones históricas del arco no se derivan, pues, del tamaño de sus piezas, ya que éstas pueden ser de pequeñas dimensiones, sino de la necesidad de un buen desarrollo técnico por la importancia de la forma precisa de las dovelas, su corte bien realizado y el cálculo de los soportes para recibir el peso del arco.

arco-var.gif (7255 bytes) 

Tipos de arcos.



Como su nombre nos lo indica el arco es un tramo de circunferencia, es decir un arco de circunferencia. Sin embargo no todos los arcos en arquitectura son simplemente una parte de un círculo sino que tienen muchas formas distintas y se construyen de maneras diferentes.

        Hay arcos de un solo centro, de dos, tres, cuatro o más y presentan estas formas:

De un solo centro:

arco-1ce.gif (8186 bytes)

De dos centros:

arco-2ce.gif (9901 bytes)

De tres y cuatro centros:


arco-34c.gif (12619 bytes)


  
   
  

Descargas:


Links:





Oscar Niemeyer, adiós a un gran soñador

 

"La vida es un minuto que pasa deprisa"
Palabras de Oscar Niemeyer a punto de cumplir 100 años

El último superviviente de los grandes maestros del siglo XX, selecto club integrado por nombres como Le Corbusier, Mies van der Rohe o Frank Lloyd Wright, ha fallecido.

El poeta de la curva peleó a brazo partido por llegar a los 105 años, que iba a cumplir el próximo 15 de diciembre rodeado por su segunda esposa, Vera Lúcia, y de una interminable saga de nietos, biznietos y tataranietos. Pero la salud de Niemeyer ya estaba seriamente tocada y comenzó a fallar en los últimos meses.


El poeta Ferreira Gullar, con quien Niemeyer mantenía una estrecha amistad, definió mejor que nadie la quintaesencia del laureado arquitecto: “El lema de la arquitectura era que la forma está subordinada a la función. La preocupación fundamental tenía que ser la funcionalidad, y la belleza quedaba en un segundo plano. Oscar unió los dos elementos, funcionalidad y belleza, porque, decía, la belleza también cumple una función”.


Nada más confirmarse la noticia, una cascada de reacciones empapó la prensa local. “Brasil ha perdido a uno de sus genios. Hoy es día de llorar su muerte. Es día de celebrar su vida”, proclamó la presidenta, Dilma Rousseff. “Niemeyer tuvo una vida muy bonita. Fue uno de los mayores artistas de su tiempo y un hombre mayor que su propio arte”, declaró el compositor y escritor Chico Buarque de Hollanda. Otra figura fundamental de la música brasileña, Caetano Veloso, añadió: “Sus curvas enseñaron algo muy nuestro al resto del mundo”.


Cualquiera que viva más de 100 años tiene tiempo de ver una cosa y su contrario. El arquitecto más famoso de Brasil, Oscar Niemeyer (Rio, 1907-2012) llegó tarde a la arquitectura (mal estudiante, comenzó la carrera estando casado), pero la cuestionó pronto. Tras ensayar los trazos rectilíneos del Movimiento Moderno en sus primeros edificios de los años treinta, decidió tropicalizar ese estilo sencillo, pero recto, demostrando que el material del siglo XX, el hormigón armado, además de sujetar podía también expresar. Niemeyer apostó por la humanidad de la curva y la plasticidad de las formas libres y vivió lo suficiente para convivir con su herencia. Contempló su propio renacimiento en generaciones posteriores, que derivaron de sus pliegues los estilos con los que se inició este siglo, sin que él mismo hubiera, en ningún momento, dejado de construir.

 

  

 


Curiosamente en un ateo, fue un templo lo que le reportó fama mundial. Corría el año 1940 cuando la iglesia de San Francisco frente al lago de Pampulha, en Belo Horizonte, habló de forma económica, pero no barata y sí monumental, de un mundo más sencillo y, acaso, más natural. Por entonces Niemeyer no era todavía el comunista acérrimo que nunca dejaría de ser desde que se afilió al partido con 38 años. (Fidel Castro llegó a decir que Niemeyer y él eran los dos únicos comunistas que quedaban en el mundo). Con todo, y tal vez como la propia ideología comunista, Niemeyer ha sido un arquitecto sumamente idealista y, sin embargo, dictatorial. Sin duda un gran artista plástico, un proyectista pionero de la forma libre, pero también alguien capaz de sacrificar la sombra de los peatones, bajo un clima tropical, en pos del altísimo valor plástico de sus edificios recortados en medio del sertao.


Convertido en arquitecto, Niemeyer no dudó en trabajar sin cobrar para el urbanista Lucio Costa. Y veinte años después, en 1956, juntos dibujarían una ciudad entera, Brasilia, en el escaso plazo de un periodo legislativo. En cuatro años levantaron catedral, ministerios, congreso nacional, tribunal federal, sede de la cancillería y calles para los ciudadanos de la nueva capital. Tal vez intuyeran que debían darse prisa. Muy poco después, un golpe militar les restaría encargos y confianza y acabaría por desterrar a Niemeyer a París, donde la misma filiación comunista que le complicó la vida en Brasil le facilitó volver a construir. Así, la sede del Partido Comunista Francés en París, la editorial Mondadori en Segrate (Italia) o la Universidad Constantina de Argelia pertenecen a esos años en los que su trabajo se exponía en el Louvre mientras en su país le rechazaban los proyectos.



Si durante cuatro años Niemeyer acudió semanalmente a Brasilia en coche empleando un día para llegar y otro para regresar fue porque el miedo a volar no le permitía coger un avión. Esa fobia tampoco le dejaría recoger la mayoría de los galardones que consiguió incluidos el Premio Pritzker, que no recogió en Chicago en 1988, el Príncipe de Asturias que no hizo suyo en Oviedo o el Imperiale, que viajó solo de Tokio a Río.


En 1980 Niemeyer anunció que iniciaba su última fase como arquitecto. Empezó entonces a trabajar en el Memorial de los amigos ya muertos, como el antiguo presidente Juscelino Kubitschek, erigido en Brasilia. Esta fase final se ha prolongado más de treinta años. Y ha resultado una de las más sorprendentes del genial proyectista. Niemeyer renació en Niteroi, frente a la playa de Ipanema. Un platillo volante de suelos fucsia y perfil más que fotogénico lo hizo resucitar para la vanguardia arquitectónica. Hoy, como quien está en la cúspide de su carrera, y con el zarandeado Centro Niemeyer —que donó a la ciudad de Avilés— todavía fresco, el arquitecto centenario tenía sobre la mesa proyectos en La Habana, Rosario (Argentina) y hasta un estadio para el mundial de fútbol de 2014, que se celebrará en Brasil. Allí, en el 3940 de la Avenida Atlántica, frente a playa de Copacabana, ha trabajado hasta el final. Sin apenas moverse de la planta décima donde está su casa ha sido capaz de construir por todo el mundo.


Vídeos: 







 




Hasta momentos antes de morir, a sus casi 105 años de edad, Niemeyer seguía haciendo planos y pensando en nuevos proyectos. Va por el este pequeño homenaje.





Links:
 

Herma








A simple vista una herma puede resultar la escultura más llamativa y singular que alguna vez hayamos visto. No es para menos, ya que las mismas son lisa y llanamente un pilar rectangular que en su extremo superior poseen tallada una cabeza y luego, en su frente, justo a la altura donde realmente debería estar si respetamos las proporciones anatómicas, un pene erecto. Su nombre proviene a partir del dios griego Hermes, ya que en los primeros tiempos en los que estas particulares piezas comenzaron a ser utilizadas, hace ya unos tres milenios aproximadamente, esta deidad era la figura representada como cabeza en la gran mayoría de los casos. Luego, no obstante, tras la adopción romana de las mismas, distintos personajes famosos o históricos fueron siendo utilizados. 

Herma 

Para entender el por qué de las mismas debemos entender el pensamiento simbólico griego. Para los antiguos griegos Hermes, además de ser el mensajero divino, era el protector de los mercaderes y viajeros; mientras que un pene erecto además de virilidad simbolizaba la predisposición a las armas, es decir, la defensa. Todo toma sentido, por supuesto, cuando aclaramos que las hermas o hermai cumplían la función de servir de hitos en el camino. Es decir, se colocaban en las rutas o en las afueras de distintos pueblos y, además de marcar cierta información, figurativamente defendían a los viajeros de los malos espíritus. Curiosamente, hoy en día solo un pequeña cantidad es conservada con sus penes intactos.

 Archivo: Herma Hermes Getty Villa 79.AA.132.jpg Archivo:. Hermafrodito (herma) jpg Archivo: Terracota herm Louvre Sb785.jpg Archivo: Herma Dionysos Getty Villa 79.AB.138.jpg

Los hermocópidas y una protesta que antecedería a los “hippies” por milenios

Quizás la mayor curiosidad histórica digna de mencionar al rededor de loshermai sea el famoso escándalo de los hermocópidas, documentado entre otros por gigantes de la talla de Plutarco y Tucídides. Todo tuvo lugar en Atenas, en mayo del año 415 antes de Cristo, cuando un grupo de saboteadores pacifistas comandados por, según se cree, Socrates a través de su pupilo Alcibíades, “mutilaran” a todos los hermai salvo uno. Esto, según dictarían, los jueces atenienses, en protesta a la partida de navíos de guerra atenienses que tendría lugar al siguiente día con rumbo a Siracusa con el fin de participar en la guerra del Peloponeso. Debido al significado simbólico de protección que poseían los hermai, este atentado lograría turbar la tranquilidad de los marinos y soldados en gran medida, y si bien zarparían según lo planeado, una larga investigación y serie de acusaciones enfrentadas tendría lugar llevando a Atenas a un estado de caos.



Archivo: 0007MAN-Herma.jpg